Los ojos llenos de intrigas, de dudas, certezas, inseguridades.
Las manos vacías, pero repletas de caricias sin fin.
Piel con piel, lunar con lunar.
La metamorfosis a medianoche comienza sin previo aviso, parecemos animales salvajes. No entra tanta pasión en una cama.
La Luna ilumina la poca ropa que nos queda. Y tus ojos rodando sobre mi cuerpo. Inmóvil te miro y me sonreís de placer.
es re lindo como escribis. no podes poner un gadget para seguir el blog?
ResponderEliminarGracias, en serio gracias. Ya lo hice!
ResponderEliminar